Todos los platos listos sobre la mesa del living,
la familia reunida, parecía otro domingo más...
Pero, escondía lo más terrible q puede pasarle
una madre y a su uniko hijo...
Era lo hora d comer, solo faltaban los limones
para la ensalada q esperaba sobre la mesa.
Fabricio se subía al limonero como mono siempre,
y el corrió a sacar el aliño q faltaba.
Esta vez subió muy alto, y sus piecitos resbalaron;
cayó sobre una estaca q atrevezo su riñón y colon,
su cabecita se asoto contra el suelo.
Esta vez subió muy alto...
Su madre aun no kiere creer q su cerebro no funciona,
aun c aferra a la esperanza d volver a verlo sonrreir.
son solo 6 años!!!..decia..
Mientras la enfermera extinguia la esperanza,
con cada silencio de la makina q media su actividad cerebral.
Mal día hoy en CHP...
Solo me keda pedirle al creador,
Jehova, mi esperanza por la vida d Fabricio...
y de la paz en el corazón d su madre.
Isk.-